“Dama y niña” y el coral

detalle AMU IVAutor: Adriaen van Cronenburch
Título: Dama y niña (#P02075)
Cronología: 1567
Óleo sobre tabla (107 cm x 78 cm)
Escuela flamenca

Adriaen van Cronenburch nació en Schagen, en torno a 1525 y falleció en Bergum en torno a 1604. Fue un pintor de los Países Bajos meridionales, especializado en retratos, género al que corresponde toda su producción conocida. Estuvo activo entre 1547 y 1590 trabajando en las provincias de Frisia y Groninga. También pasó varios años en Bélgica, especialmente en Lovaina, en cuya universidad estaba matriculado en 1553, y en Amberes.

AMU IV

El primo de Adriaen se casó sucesivamente con dos mujeres de familias aristocráticas y a través de esos contactos Cronenburch se convirtió en secretario de municipio de Tietjerksteradeel en 1567 y el principal retratista de la región. Tras la constitución de la Unión de Utrecht, la confederación de las siete provincias del norte para hacer frente a la hegemonía española, dejó Frisia debido a su renuncia a abjurar del catolicismo y a su fidelidad a Felipe II.

El retrato doble forma parte de una serie de cuatro obras de Cronenburch presentes en el Museo del Prado (números de inventario de P2073 a P2076) que son todas retratos de mujeres, dos dobles y dos individuales, de pie y hasta la rodilla con el mismo fondo arquitectónico que le dotan de una unidad visual. db15af313aEsta arquitectura está formada por  arcos-hornacinas con pilastras construidas con sillares, adornados con unas cabezas de león sujetando unas argollas e inspirados en los grabados del Libro Extraordinario de Sebastiano Serlio. La leyenda NASCENDO/MORIMVR bajo la línea de impostas de uno de estos arcos, la calavera sobre la mesa y las flores que lleva la niña aluden a la fugacidad de las cosas de este mundo, la fragilidad de la belleza, el tema de la Vanitas, la inutilidad de los placeres humanos ante la certidumbre de la muerte. La firma del cuadro es  A.a.a.a. van Cronenburg y se leyó durante mucho tiempo como Anna van Cronenburg. Posteriormente se vio que era un pequeño anagrama que se debía interpretar como “A tres aes” que en holandés es “A, drie a´en” que es su nombre de Adriaen.

Madre e hija, el parecido es innegable, están vestidas de una forma bastante austera pero la niña lleva un cinturón dorado formado por placas con retratos individuales y un óvalo central que lleva un retrato de otro material y de mayor tamaño. De dicha placa central cuelga un rosario de coral. La presencia de joyas de coral está presente en otros cuadros del Prado y de otros museos.  pradoUn rosario de coral lleva el Niño Jesús en la tabla atribuida a Gérard David (Museo del Prado #P01537 ) y pintada hacia 1520 mientras que en la llamada Virgen del Arzobispo Mur, realizada por Blasco de Grañén para la localidad de Albalate del Arzobispo, el Niño sujeta una rama de coral rojo. GhirlandaioUn collar de coral destaca en diversos retratos de niñas y mujeres jóvenes pintados por Domenico Ghirlandaio, como el realizado en torno a 1490 y que se expone en la National Gallery de Londres o el de María del Rosario Falcó y Osorio pintado por Federico Madrazo en 1873 y que se conserva en el Palacio de Liria de Madrid o la “Niña hindú con collar de coral” pintada por Diego Rivera en 1926 propiedad del Museo de Arte Contemporáneo de San Francisco.

El interés inicial por el coral probablemente surgió por la teoría de la Medicina clásica griega denominada de las signaturas. Esta idea suponía que la forma, el color u otros factores del aspecto de las semillas, frutas, minerales y otros eran una señal de su utilidad, mensajes que Dios habría dispuesto en las obras de su creación que permitieran la identificación de sus propiedades curativas. Illustration.Hepatica_nobilisAsí, la amatista de color vinoso era buena para combatir la embriaguez (amethystos significa no borracho), las hepáticas (Hepatica nobilis) con sus hojas trilobuladas eran buenas para los problemas del hígado o las raíces del rosal silvestre para las mordeduras de los perros porque sus espinas recordaban los colmillos del animal.  En el caso del coral, se pensó que el coral blanco servía para aumentar la producción de la leche en madres y nodrizas mientras que el coral rojo, el que nos ocupa, para fortificar la sangre en las anemias y para combatir las hemorragias.

El coral, frente a lo que algunos piensan, es un animal y en esa medicina precientífica, algunos órganos se utilizaban para curar los males de sus homólogos humanos: “el ojo derecho de la rana para el ojo derecho y el siniestro para el izquierdo…” El cáncer, que en latín significa cangrejo, se abordaba terapéuticamente colocando uno de estos crustáceos junto al enfermo, retirándolo al cabo de un tiempo y dándole muerte, con la idea que al matar al pobre cangrejo estaríamos impulsando la eliminación del cáncer. coral1Aunque nos parezca algo cómico no deberíamos olvidar que en la actualidad las ostras se consideran supuestamente afrodisíacas pues su aspecto húmedo se asemeja al órgano femenino excitado o que los rinocerontes han sido llevados prácticamente a la extinción por la creencia de que el polvo de su cuerno puede ayudar a conseguir una erección. El coral fue asociándose progresivamente a funciones femeninas como la menstruación o el parto o a los problemas derivados como las anemias, los abortos o las hemorragias imparables tras dar a luz, las principales causas de mortandad en las mujeres jóvenes. Por eso en muchos cuadros lo llevan mujeres jóvenes o que acaban de dar a luz, como la propia Virgen María.

El coral sumaba su intenso color rojo, su aspecto arborescente parecido a como se observaba la sangre coagulada tras una hemorragia o la misma distribución ramificada que se observa en los vasos sanguíneos o las venas varicosas. El coral por otro lado es un animal, que dentro del mar parece un vegetal (su aspecto ramificado, su nula movilidad) y cuando es extraído del mar toma un aspecto mineral, casi eterno. Antiguamente se pensaba que era animal, vegetal y mineral al mismo tiempo lo que le daba unas connotaciones únicas, casi místicas. Estas peculiares características hicieron que el coral rojo se convirtiera en el remedio por excelencia para todos los problemas relacionados con la sangre.

El coral es un animal invertebrado colonial donde miles de individuos (pólipos) se agrupan en conjuntos que pueden tener a lo largo de los siglos metros y metros de espesor como en los arrecifes coralinos o en la Gran Barrera australiana. La mayoría de los corales obtienen sus nutrientes de unas algas unicelulares denominadas zooxantelas con las que viven en simbiosis. Puesto que es imprescindible que esas algas puedan hacer la fotosíntesis, estos corales necesitan aguas limpias y poco profundas que la luz solar pueda atravesar. Los arrecifes coralinos están formados por los esqueletos de carbonato cálcico de billones de pólipos y son uno de los ecosistemas de mayor biodiversidad con miles de especies de crustáceos, moluscos, algas y peces.

Según la mitología griega, el coral rojo se formó cuando Perseo fue a rescatar a Andrómeda de las garras del monstruo Cetus. Rubens_MedusaPara ello, utilizó la cabeza de Medusa que había cortado en una hazaña anterior, petrificando con la mirada de la Gorgona al monstruo que custodiaba a la joven. Tras ello, Perseo tiró la cabeza de la Medusa al fondo del mar, quedando depositada sobre unas algas marinas que se petrificaron -como los humanos que osaran mirarla- y tomaron el color rojizo de la sangre que soltaba la cabeza cortada. La reproducción del coral, según cuenta Ovidio, vino de mano de las ninfas marinas, que fueron plantando el coral por el resto del Océano.

El interés por el coral es muy antiguo. En el  Dioscórides dice así

El coral llamado litodendro de algunos, que quiere decir árbol de piedra, se muestra ser una planta marina, la qual en saliendo del profundo del agua, se epernece, como elada, y endurecida del circunciso ayre. Hallase grandissima copia de él en el promontorio de Syracusa  llamado Pachino. Tienese por excelentísimo el roxo, el que en su color se parece al Antherico, ò à la muy encendida Sandice, y se muele tan fácilmente como ella; el que es liso, e igual por todas partes, el que dà de sì un olor semejante al del musgo, y al de las ovas marinas; y además de esto, el que tiene forma de árbol, y es muy poblado de ramos, assi como el Cinamomo.

Los corales son muy variados y pueden tener un esqueleto compacto, ramificado o incluso córneo y flexible. En la misma obra de Dioscórides se aclara que no todos tienen los mismos efectos.

Repruebase por vicioso el que tiene forma de piedra, el sarnoso, el vazìo, y el fistuloso: aprieta, y resfria delicadamente el Coral, reprime la carne demasiadamente crecida, extirpa las cicatrices que dàn fealdad a los ojos, encarna, y encora las llagas hondas, restaña la sangre del pecho eficacissimamente, socorre a los que no pueden orinar; y bebido con agua deshace el bazo.

Primer-LapidarioTambién aparece en el Lapidario de Alfonso X el Sabio donde se recogen conocimientos médicos y astrológicos de la antigüedad y el mundo islámico y donde también se habla de la utilidad del coral rojo para curar enfermedades de la sangre “Y si la destemplasen, molida con vino o con alguna cosa, y la dieren a beber a los que escupen sangre, presta mucho”. Se usaba también para la protección de los bebés contra el mal de ojo y así las comadronas lo llevaban para proteger al recién nacido o por si una bruja entraba en la sala en la que se desarrollaba el parto. En la actualidad no se emplea como medicamento y es considerada una de las cuatro joyas de origen biológico junto con las  perlas, el ámbar y el marfil.

El coral se ha usado también para evitar o solucionar desavenencias dentro del matrimonio “Y si la ponen en lugar donde haya casados, hace que se amen mucho los maridos con sus mujeres, y si alguna desavenencia hubieron antes, hace que se torne en amor”. También  para conseguir amor –y por eso lo vemos quizá también en tantos retratos de jovencitas o en los trajes de vistas de La Alberca (Salamanca)-, detalle de vistaspara lograr respeto y reconocimiento social “su virtud es tal, que si alguna mujer la tuviere consigo, será mucho amada de las otras mujeres, y dirán bien de ella” y también, y de forma muy especial, para la protección de los niños. Se ponían colgantes a los niños “se colgara coral rojo y semillas de peonia de su cuello y brazos para fortalecerlo, confortarlo y hacer que el niño estuviera vivaracho y feliz” o cinturones de lactante, formados por un importante grupo de amuletos entre los que nunca falta el coral como los que se pueden ver en el maravilloso Museo Etnográfico de Castilla y León (Zamora). Por tanto, diversos museos y colecciones nos muestran retratos de niños con pequeños trozos de coral colgando de sus cuellos, pendientes, pulseras, o rosarios como en este caso.

De los cientos de miles de especies de corales la más valorada es el coral rojo del Mediterráneo (Corallium rubrum) que crece 1 milímetro al año y vive a profundidades entre 10 y 280 metros con una preferencia por cuevas y grietas. Debido a su sobreexplotación, los resultados de su extracción han caído un 66% en los últimos 20 años.  RedCoralPolypAfortunadamente se prohibió en todo el Mediterráneo su obtención mediante redes de arrastre que causaban un enorme daño a los ecosistemas marinos. El coral verdadero se puede distinguir del falso por la presencia en el auténtico de pequeños agujeros (el interior del pólipo), estriaciones paralelas (pólipos cortados tangencialmente) y su densa textura.

Los arrecifes de coral están en una situación precaria en muchas partes del mundo. La extracción del coral, la polución, las grandes obras de ingeniería como puertos y canales o la sobrepesca están afectando a muchos ecosistemas coralinos. article-1360116-00F1CE34000004B0-729_472x304Uno de los cambios más problemáticos es el aumento de la temperatura y la subida del nivel de las aguas debido al cambio climático y la acidificación de las aguas debido a las emisiones de gases invernadero. En 1998, el 16% de los arrecifes coralinos murieron como resultado de un calentamiento del agua del mar. Se considero que un 60% de los arrecifes del mundo están en peligro por la acción del hombre y gran parte de ellos se perderán si las tendencias actuales se mantienen. El coral se estudia mucho ahora como biomarcador de los problemas que el calentamiento global está causando y para ver la capacidad de los organismos de adaptarse a este problema del que todos somos responsables.

 

Para leer más:

  • Hernando Sebastián PL (2012) El coral rojo como recurso médico y mágico. Una visión antropológica desde el arte. Temas de antropología aragonesa 18: 211-229.
  • Silva Maroto, P. (2008)  El retrato del Renacimiento, Museo Nacional del Prado, p. 245
  • http://www.kashgar.com.au/articles/the-story-of-coral

José Ramón Alonso

CATEDRÁTICO EN LA Universidad de Salamanca

Neurocientífico: Producción científica

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BNEDialNetGredosLibrary of Congress


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