Gearoid Mannion y su familia, que incluye a dos niños con autismo, Conor, 9, y Darragh, 7, han tenido sin embargo una experiencia mucho más grata camino de Málaga. Supieron que el aeropuerto de Shannon (Irlanda) había puesto en marcha una iniciativa para apoyar a las personas con un TEA, así que llamaron al servicio de atención al cliente y le expusieron su situación. Tras hacer el check-in, les pusieron unas pulseras y les dieron unas gorras naranjas que les identificaban como pasajeros donde al menos una persona tenía autismo. Eso hizo que pasaran los controles de seguridad por una vía rápida, algo de lo que hasta ahora gozaban otras personas que lo necesitan menos.
Delta Airlines, en combinación con el aeropuerto internacional de Atlanta, ha creado una sala similar, con algunos objetos como una pequeña piscina de bolas o una escultura de agua, que se sabe que ayudan a calmar a los niños con autismo.
Afortunadamente Shannon y Atlanta no son los únicos aeropuertos preocupados por facilitar los viajes en avión a las personas con un TEA y a sus familias. Otras aerolíneas y otros aeropuertos por todo el mundo están actuando de la misma manera, un proceso que en Estados Unidos es impulsado por The Arc, un grupo que representa en Washington a las personas con discapacidad intelectual y trastornos del desarrollo. Los capítulos locales de esta organización se han asociado con un aeropuerto, una compañía aérea y con la agencia oficial, la Transportation Security Administration. Más de treinta aeropuertos colaboran este año haciendo simulacros, pequeños vuelos, facilitando ayudar a quitar el miedo a volar. Para una persona con autismo, saber lo que le espera, estar familiarizado con la experiencia de usar un aeropuerto y un avión es algo enormemente práctico y que permite una experiencia real mucho más fácil el día que finalmente hay que volar.
Un motivo obvio para este avance en la concienciación de aeropuertos y compañías aéreas es el alto número de personas afectadas por un TEA.
Otros aeropuertos como el Internacional de Vancouver están ofreciendo simulacros de vuelo para que las personas con TEA y sus familias se aclimaten a la experiencia de volar. En estos simulacros, parte de las jornadas de puertas abiertas, los participantes hacen el check-in, pasan a través de los controles de seguridad y montan en el avión. Luego se bajan. Otros aeropuertos, como el de Bristol en el Reino Unido, ofrecen esta práctica a demanda, los participantes no llegan a abordar un avión pero hacen todos los demás pasos del uso de un aeropuerto. En el aeropuerto de Atlanta, Delta ha puesto en marcha vuelos simulados, conocidos como Taking Flight, que son guiados por dos empleados, Sandy Smith, personal de atención al cliente, y Eric Ries, piloto. Los dos tienen hijos con TEA y hacen esta labor de forma voluntaria. Pueden explicar a los padres de otros niños su experiencia personal, entenderles mejor y todo ello genera una mayor confianza. Ries y su hijo han volado juntos 45 veces. Su mejor consejo:
Alguna familia comentaba que hasta entonces solo habían hecho viajes por carretera, que pensaban que tomar un avión era algo imposible para ellos. Después de tomar parte en uno de los programas de Wings for Autism llegaron a la conclusión de que quizá fuese posible. Ellos afirmaron: «nuestro sueño era ir a Hawái y en vez de pensar que nunca podremos ir, ahora tenemos esperanza de que a finales de este año podremos hacer el viaje». Nunca sabemos hasta donde puede llegar una persona con autismo, y si los demás arrimamos un poco el hombro, será todo mucho más fácil y podrán llegar, ya no metafóricamente, a cualquier lugar del planeta.
Para leer más:
- Vora S (2017) At Airports, Making Travel Easier for Autistic PassengersAt Airports, Making Travel Easier for Autistic Passengers. The New York Times 13 de julio. https://www.nytimes.com/2017/06/13/travel/at-airports-making-travel-easier-for-autistic-passengers.html
- http://www.foxnews.com/travel/2015/05/11/what-parents-children-with-disabilities-should-know-before-traveling.html
- http://www.thearc.org/wingsforautism
Una respuesta a “Autismo en el aeropuerto”
En Barcelona (España) tuvimos la oportunidad de hacer un simulacro en el aeropuerto gracias a la Asociación Aprenem. No se si fue por eso, pero este mes hemos hecho nuestro primer vuelo y fue todo como la seda! También ayudó que a las personas con discapacidad y acompañantes nos dejaron pasar los controles sin hacer cola y entrar una botella de agua.